El Bici-club Verano Azul quiere agradecer a Saba y Loles su hospitalidad en el pasado fin de semana, en que invitaron a todos los miembros del Bici-club, junto con Fer y Ester, a la inauguración de su reformado hogar. La velada sirvió para que Chema presentara sus proyectos para la recién constituida "Fundación para la familia y la convivencia".
Saba y Loles eligieron un menú muy elaborado, con entrantes ligeros que despertaron el apetito de todos los presentes (los carpaccios, quizá con exceso de mostaza). El plato principal, de caza menor, no tuvo el esperado acompañamiento de frutas del bosque (o de puré de castañas), pero la pera natural al vino no desmereció. Los postres, pese a ser algo improvisados, fueron también muy celebrados. Algunos presentes criticaron la escasez de vino, ya que las siete botellas fueron un acompañamiento insuficiente para tan frugal cena.
Pudimos comprobar las calidades de obra del nuevo hogar de la pareja anfitriona, con excelentes acabados en paredes y parquet. Cabe destacar que la decoración no estaba bien resuelta, con exceso de complementos de Ikea o bien estaba incompleta, aunque es comprensible en una pareja tan joven, que pasará la mayor parte del tiempo entregados al amor y la pasión.
Chema, como presidente de la “Fundación para la familia y la convivencia”, compartió sus propuestas para el próximo encuentro, a principios de abril, en una casa rural aún por determinar. Durante el fin de semana elegido, se alternarán rutas en bicicleta con actividades familiares. Chema, a pesar de sus muchas ocupaciones a la espera del nuevo bebé, nos mantendrá informados de los detalles.
Todos disfrutamos de una estupenda velada, en la que Fer destacó por su especial paladar, sensibilidad y sutileza en la degustación de los vinos. Os invito a ver las fotos en el album del Bici-club
El Presidente
3 comentarios:
Queridos compañeros, me encuentro
desolado ante el hecho de comprobar la negativa de determinadas familias ( Sabariego-Suñer, Tevar y sra.)a acudir al 1º encuentro de las convivencias familiares de la fundación para las familias.
todavía estoy esperando su confirmación a la asistencia al encuentro para poder concretar plazas, pero el tiempo pasa y veo peligrar la disponibilidad para las fechas señaladas.
Esta vez he tenido que solicitar que lá crítica gastronómica de la cena, sea realizada por un tercero. Cabe decir que la presencia de Fer animó sin parangón la velada, atrás quedaron las cenas de fuet, chorizo y tortilla de patatas.
Tras esta cena cabe que el gran público reconozca el esfuerzo culinario que realice. Los asistentes a la cena pudieron comprobar mi excelente profesionalidad y como me tomo en serio esta profesión. A mis condiciones personales para la cocina se añade una virtud destacada: la sensatez. Por esto huyo del divismo y no deben los comensales esperar encontrar en mis platos el afán por la innovación. Aunque no la desdeño. Tampoco esperen encontrarse ante la cocina de la abuela, guardadora de sabores atávicos. Lo cual no significa que se trate de una cocina basada sólo en el producto, aun siendo éste de esxcepcionales cualidades.
Mi cocina es expresión de mi seriedad y la sensatez que me caracteriza. Evoluciona y ha evolucionado suavemente en los más de ocho años en que estoy al frente de mi casa. Practico una gastronomía actual sin “ismos” ni exageraciones, teniendo en cuenta el público al que se dirige.
Concretando la crítica fue curioso como nuestras compañeras sentimentales no tuvieron escrúpulo alguno respecto a los tártares de atún y salmón que presenté. No se si se acordaron que basícamente era pescado crudo.
Respecto al comentario hiriente sobre la guarnición del magret de pato no vale la pena responder, esta receta está dictada por uno de los, para mi, más tres grandes cocineros televisivos españoles. El gran JOSÉ ANDRÉS.
P.D:: El tartar tb era de JOSÉ ANDRÉS.
Si, si, lo que tu digas, pero se te fue la mano con la mostaza...
Por otra parte, eché de menos una carta más amplia de refrescos. Como bien sabes, la intensidad y complejidad de los aromas de un refresco de cola hacen que pueda tomarse en cualquier momento del día, y es perfecto para acompañar carnes o patés.
Aunque no soy partidario de hacer publicidad, unas Pepsis habrían resultado ideales, por su dulzor acaramelado y su capacidad para estimular la percepción a través de su acidez, así como la propiedad del gas carbónico de limpiar las papilas gustativas antes del siguiente bocado.
Para el aperitivo y el tartar hubiera sido perfecta una bebida de limón. Esperemos que la próxima vez disfrutemos de mayor variedad en los caldos...
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