miércoles, 12 de enero de 2011

Cena de Gala 2010. Biciclub Verano Azul

Os informamos que en el fin de semana del 22 de enero tendrá lugar una más de las memorables Cenas de Gala del Biciclub, en este caso tendrá lugar en casa del actual Presidente del Biciclub Verano Azul.
Que me toque realizar la cena y mi condición de Presidente, supone un reto para mi ya que soy consciente, verdaderamente, de las espectativas que se están creando respecto a este evento.


Ruego me envies sugerencias, propongo una reedición de los grandes clásicos que tanta fama me han granjeado en el universo gastronómico. El postre ya está decidido, probablemente muchos de vosotros no hallais probado mi famoso Coulant, va a ser una oportunidad que no olvidareis.
Unos consejos:
1.  En los actos oficiales, el que invita siempre debe ser el de rango superior, nunca de rango inferior al invitado. Y ambos, anfitrión e invitado de honor, serán los que ocuparán la mesa de presidencia.

2.  La importancia concedida al anfitrión se extiende también a su pareja y a la del invitado. Es decir, la primera presidencia de la mesa es del anfitrión y de la anfitriona.
3.  El lugar de honor principal siempre será el de la derecha. Es decir, a la derecha de cada comensal debe ubicarse a la persona de mayor relevancia.
4. En el orden de los comensales debe alternarse a las damas con los caballeros y las parejas no deben sentarse juntas. Además, es recomendable que tampoco coincidan uno frente a otro.
5. Como costumbre de etiqueta, existe la norma que obliga a los caballeros a acompañar a las damas al comedor (jamás a las propias esposas, sino a otras damas asistentes al evento). Para estos casos, se facilitan tarjetas de orden de asiento a los caballeros a su llegada, en las que también se indica el nombre de la dama a la que deben acompañar.
6. En las tarjetas debería indicarse con un plano el lugar donde debe colocarse cada comensal.
7. Es importante evitar que los invitados extranjeros coincidan juntos en la mesa. Lo adecuado es alternarlos con los nativos. Aunque eso sí, hay que garantizar que las personas que están contiguas puedan hablar un idioma común.
8. Hay que evitar siempre las mesas con trece comensales, por si hubiera invitados supersticiosos.
9. Si se van a dar discursos, el podio debe estar ubicado a la derecha de la mesa presidencial. Y siempre, opuesto de frente a la puerta de entrada.
10. El plazo razonable para envío de las invitaciones es, como máximo de 30 días antes de la celebración del evento, y como mínimo de 20 días antes. Así, dejará tiempo suficiente para la organización.

2 comentarios:

Fernández dijo...

Cuando el anfitrión es un cocinero reputado como Saba, uno puede presentarse en la cena con apenas con un ramo de flores y muchas ganas de disfrutar con la comida.
Sin embargo, ya que nos ofrece la posibilidad de elegir, me atrevo a hacer unas sugerencias...
Para las carnes, yo me quedaría con algún plato de la cuisine traditionnelle espagnole, algo sencillo como una oreja adobada, unas brochetas... acompañadas de una buena sidra.
Ahora bien, se pensamos en pescado, no puede faltar una tajaditas de bacalao o el famoso rape adobado. Sería un buen momento para probar algún plato de tradición japonesa: ¿qué tal algo del refinado kaiseki?. En este caso yo voto por un maridaje con cava.
Sobre el postre parece que ya está todo dicho, así que lamentaremos no probar el afamado tocino de cielo de la casa.
Nos vemos el sábado...

Fernández

José M. Sabariego dijo...

Tienes que abandonar el mundo de la brocheta, las salsas de queso para dipear, papas, pate apis, encurtidos y demas simpleces a las que tu paladar se ha acostumbrado desde tu etapa universitaria. Lo del cava ya estaba pensado, pero nunca con el postre y Dominio de la Vega Reserva siempre por supuesto. El cazón bien frito también es otra posibilidad no como recuerdo de tan manera infame y sacrilega se presento en otra ocasión. El tartar, el pulpo y el carpaccio acechan como opciones.