jueves, 4 de agosto de 2011

FUNDACIÓN BVA

Es verano, y la actividad del Biciclub Verano Azul decae por los motivos habituales del estío: encuentros familiares, vacaciones, calor agobiante… Sin embargo, la Fundación BVA encuentra en estas fechas oportunidad para desarrollar sus proyectos, la mayoría de ellos dirigidos a los más pequeños.
Sería muy largo enumerar todos los actos, pero queremos destacar los que más ilusión han despertado en los niños.

PAELLA DOMIGUERA
Nuestro Presidente ofreció un estupendo arroz a banda para las familias de los miembros, así como amigos afines al Biciclub. El arroz estaba de muerte, y fue muy aplaudido por todos.


Los niños disfrutaron de un día con piscina y actividades al aire libre, y los mayores tuvimos ocasión de exponer nuestras ideas sobre la marcha de nuestro club. Entre todas las ideas que surgieron, cabe destacar la propuesta del Lupas que nos animaba a hacer un tramo del Camino de Santiago en bici, para después del verano. Esta sugerencia causó cierta sorpresa, sobre todo porque surgió antes de que el Presidente empezara a tomar cubalibres; habrá que tomarla como una propuesta seria sobre la que habrá que discutir los detalles.



JORNADA AL AIRE LIBRE


Una tarde dedicada también a los pequeños, que pudieron disfrutar de actividades al aire libre. Cómo no, lo más celebrado fue la piscina, los globos de agua y la batalla de pistolas de agua. Tras la cena los muchachos regresaron a casa, agotados por la intensa actividad.


Por desgracia, pudimos contemplar en las proximidades cómo un incendio arrasaba la zona de Els Cerros (Llombai) y que se extendió por La Serreta (Real de Montroi). La actividad de los helicópteros, hidroaviones y avionetas del servicio de extinción impresionó a los chavales, que ahora tienen en su haber una experiencia más que sin duda les hará apreciar mucho más el valor de nuestro entorno natural.




DIVERSIÓN EN AQUARAMA


Con menor éxito de asistencia (de asociados del Biciclub, que no de amigos) disfrutamos hace unos fines de semana de un día en Aquarama. Sobran las explicaciones, ya que es fácil adivinar que los chicos no pararon en todo el día.


La verdad es que también los mayores nos divertimos mucho, en parte porque Sergio y sus colegas ya iban por su cuenta y pudimos centrarnos más en Adrián y los más pequeños.

En la Fundación BVA no dejamos de pensar en nuestras familias y amigos, y por ello seguiremos haciendo propuestas para que podamos pasar buenos ratos juntos. Muchos proyectos se nos quedan en el tintero, pero con un poco de vuestro apoyo iremos cumpliendo todas estas ilusiones.

Un saludo.

Fernández
Presidente Fundación BVA

2 comentarios:

José M. Sabariego dijo...

Aquí hay gente que ni conozco, esto se está desvirtuando totalmente.

Fernández dijo...

Esa es la grandeza de nuestro Biciclub: dar sin pedir nada a cambio.

Estos muchachos despreocupados de hoy pueden ser los socios de mañana...

Fernández