domingo, 30 de noviembre de 2008

Antenas de Montepicayo

Después de algunos sábados de dura montaña, esta semana nos hemos tomado la cosa con más calma. Para rodar tranquilamente pero sin amuermarse, nada mejor que una vuelta por Montepicayo.
Esta excursión se está haciendo un hueco entre las clásicas de nuestro bici-club, presicamente porque es una etapa rodadora (más de 60 km), pero tiene ese puntito... ese aliciente que le da la subida a las antenas. En esta ocasión, la meteorología no animaba demasiado, lo cual añadía emoción al asunto. Al final, tuvimos de todo: lluvia ligera, viento, frío, sol...A pesar del aporte de vitamina C, Saba se vió aquejado de las más diversas dolencias: picores, enfriamiento de los miembros, flato... todo ello de origen psicológico, pues desde las primeras pedaladas Saba hubiera preferido que se cancelara la etapa, en favor de un almuerzo en La Pascuala.
Debido al viento helado en la cima de Montepicayo, no se pudo completar el ascenso a la cruz, tan esperado por todos. Queda pendiente para la próxima temporada.El almuerzo, sin pena ni gloria, pues había poca variedad en los bocatas y no apuramos las litronas...
La salida de la semana que viene queda en duda, pues se trata de un puente y las obligaciones familiares mandan.

El Presidente.

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